¿Estás pasando por una situación difícil en tu vida? En el siguiente video, quiero compartir mi verdadera historia sobre cómo Jesús me sacó de la difícil situación por la que había pasado. Que Jesús te hable personalmente mientras miras el video a continuación y responda tus oraciones. Estamos orando por ti.
Querido amigo, Esperamos que hayas orado junto con nosotros en el video anterior. Jesús se preocupa profundamente por tu futuro y quiere sanarte de toda tu ansiedad.
Antes de continuar, nos gustaría informarte que no somos consejeros ni trabajadores de la salud. Oramos por todos los que visitan esta página. Creemos que Dios Todopoderoso puede tocar la vida de cada lector y resolver sus problemas, que provocan ansiedad, preocupación y miedo. No importa quién seas. Independientemente de tu origen, religión o raza, Dios te ama. Él se preocupa por tu futuro.
Si tienes alguna duda sobre si Jesús puede realmente tocar tu vida y sanarte de la depresión, puedes leer el enlace de testimonios que te proporcionamos a continuación. Jesús ha hecho grandes cosas en la vida de muchas personas. Él puede hacer lo mismo por ti también. La Biblia dice: “Dios no hace acepción de personas”. Jesús hará por ti lo mismo que hizo por los demás. Eres su hijo precioso, creado a su propia imagen. Jesús puede sanarte, consolarte y aconsejarte. Él puede tomarte de la mano y guiar el resto de tu vida.
Si quieres saber lo que Jesús ha hecho por los demás, puedes leer aquí => Testimonios. Nuestro Dios no es un Dios parcial. Los testimonios son verdaderos ejemplos de lo que Dios puede hacer en tu vida.
Nos gustaría orar contigo en breve. Jesús escuchará nuestras oraciones y responderá cada una de ellas. Él enjugará tus lágrimas y llenará tu corazón de paz.
Recibimos correos electrónicos llenos de ansiedad de muchas personas que viven con enfermedades, relaciones rotas, culpa por su propio pasado, deudas y muchas otras condiciones. Dios nos invita a todos a venir a Su presencia y recibir sanidad espiritual, mental y física. La sanidad que Dios ofrece es absolutamente gratuita. No tienes que pagarle a nadie ni tienes que ir a ningún lado. Puedes orar donde estés y recibir Su presencia.
Jesús dijo: “Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os haré descansar”. Es una invitación abierta para todos. Todos somos hijos del Dios todopoderoso. Él se preocupa genuinamente por nosotros. Él puede despejar la nube oscura que rodea nuestras vidas y liberarnos de todos los problemas. Vamos a abordarlo en un proceso de tres pasos. Comencemos.
Date cuenta de que hay un Dios que se preocupa por ti.
El primer pensamiento cuando estamos pasando por dificultades en la vida es la soledad. Creemos que nadie está con nosotros. Todos están en contra de nosotros. Podría ser cierto. Pero incluso si todos nos abandonan, hay un Dios que nos creó y Él nunca te abandonará. Dios se describe a sí mismo en la Biblia de la siguiente manera.
“Yo soy el Señor, el Señor Dios, misericordioso y clemente, lento para la ira y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia y benevolencia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado;”
El Dios que nos creó es compasivo, clemente y lento para la ira. Es posible que hayamos cometido varios errores en nuestras vidas pasadas, tomado las decisiones equivocadas o nos hayamos alejado mucho de Él. Pero Jesús te está esperando. Quiere darte la bienvenida nuevamente a Su presencia.
El amor y la compasión de Dios nunca cambian. Dios dice en la Biblia: “Aunque tiemblen los montes y se muevan las colinas, no se tambaleará mi amor inagotable por ti, ni se quebrará mi pacto de paz”, dice el Señor, que tiene compasión de ti.
Es mejor permitir que Dios te hable en lugar de que yo escriba. Aquí hay más palabras de Dios de la Biblia que dicen mucho sobre cuánto se preocupa Dios por ti.
¿Puede una madre olvidar a su bebé de pecho y no tener compasión del hijo que ha dado a luz? Aunque ella pueda olvidar, yo no te olvidaré.
Ciertamente el brazo del SEÑOR no es demasiado corto para salvar, ni su oído demasiado torpe para escuchar. Él te sacará.
Porque yo sé los planes que tengo para ustedes, —declara el Señor— planes de bienestar y no de calamidad, para darles esperanza y un futuro.
Porque de tal manera amó Dios al mundo: que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en él no se pierda, mas tenga vida eterna. “Consolaos, consolaos, pueblo mío”, dice vuestro Dios.
Acepta que Dios tiene el poder de cambiar tu situación de vida.
En segundo lugar, acepta que Dios tiene el poder de cambiar tu situación de vida. Jesús todavía está vivo. Todavía sana a muchos. Repara muchos corazones rotos todos los días. Él responde las oraciones. Jesús dijo: “No los abandonaré como huérfanos; vendré a ustedes”. No estás solo en tu situación difícil. Jesús está contigo. Él quiere ayudarte. Él es todopoderoso. Lo que no es posible para ti es posible para Dios. Él puede hacer posible lo imposible.
A continuación, se presentan algunas de las poderosas palabras de Jesús:
Jesús gritó en voz alta: «¡Lázaro, sal fuera!» El muerto salió, con las manos y los pies envueltos en vendas y un sudario sobre el rostro. Jesús les dijo: «Quítenle las vendas y déjenlo ir.
Tomándole la mano, le dijo: «Talitha koum», que significa «Niña, levántate». Y la niña (muerta), que tenía doce años, se levantó inmediatamente y caminó. Estaban abrumados y totalmente asombrados.
Luego, él (Jesús) se acercó al ataúd y lo tocó, y los que lo llevaban se detuvieron. «Joven», dijo, «te digo, levántate». Entonces el niño muerto se incorporó y comenzó a hablar. Y Jesús se lo devolvió a su madre.
Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin», dice el Señor Dios. “Yo soy el que es, el que siempre fue y el que aún ha de venir, el Todopoderoso.
Los discípulos fueron y lo despertaron (a Jesús), gritando: “¡Señor, sálvanos! ¡Nos vamos a ahogar!”. Entonces se levantó y reprendió al viento y a las olas, y de repente hubo una gran calma. Los discípulos estaban asombrados. “¿Quién es este hombre?”, preguntaron. “¡Hasta los vientos y las olas le obedecen!”.
El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras nunca pasarán.
Así que, si el Hijo los libera, serán verdaderamente libres.
Yo (Jesús) soy el que vive. Morí, pero miren, ¡estoy vivo por los siglos de los siglos! Y tengo las llaves de la muerte y del sepulcro.
Jesús vino a liberarnos de la maldición de la esclavitud y de las consecuencias del pecado. Él también puede cambiar tu situación, sin importar cuán difícil sea. Deja que tu corazón ansioso y preocupado encuentre consuelo en los poderosos brazos de Jesús hoy. Él es nuestro salvador y nuestro redentor. No hay nada imposible para Dios.
Cree que Dios puede sacarte de la ansiedad, las preocupaciones y el miedo.
El tercer paso y el más importante para salir de la ansiedad es creer en el poder de Dios. La Biblia dice: “Sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a él crea que existe y que recompensa a los que lo buscan”.
Jesús siempre busca la fe en los corazones de las personas antes de realizar milagros.
Querido amigo, ¿estás preocupado por tu situación actual? Por favor, acércate al Dios del cielo con una fe fuerte en que él puede hacer cosas por ti.
¿Qué quieres que haga por ti?”, le preguntó Jesús.
El ciego dijo: “Rabí, quiero ver”.
“Ve”, le dijo Jesús, “tu fe te ha sanado”. Inmediatamente recobró la vista y siguió a Jesús por el camino.
“Ten fe en Dios”, le respondió Jesús. “En verdad les digo que cualquiera que diga a este monte: “Quítate y tírate al mar”, y no dude en su corazón, sino crea que sucederá lo que dice, lo que diga le será concedido.
Al ver Jesús la fe de ellos, le dijo al paralítico: “Hijo, tus pecados te son perdonados”.
Querido lector, Dios se preocupa por ti. Él quiere ayudarte. Vayamos a Su presencia y pidámosle que entre en nuestra vida. Él quiere liberarte de todas las ansiedades, temores y preocupaciones. Oremos a Jesús.
Por favor, coloca tu mano sobre tu corazón e invoca el nombre de Jesús. Haz la siguiente oración con tus propias palabras.
Querido Jesús, vengo a ti con un corazón humilde. Tú sabes todo sobre mi vida. Tú conoces las ansiedades, preocupaciones y temores por los que paso. Por favor, entra en mi vida. Por favor, perdona todos mis errores pasados. Si he cometido errores, consciente o inconscientemente, por favor, muéstramelos. Ayúdame a conectarme contigo. Lávame con tu preciosa sangre. Tú eres mi Padre celestial. Quiero ser tu precioso hijo.
Eres un Dios amoroso y cariñoso. Eres un Dios todopoderoso. Nada es imposible para ti. Creo en ti. Tienes el poder de cambiar mi vida. Pongo todas mis preocupaciones en tus manos. Por favor guíame. Jesús, tú has dicho: “Así que no te preocupes por el mañana, porque el mañana traerá sus propias preocupaciones. Los problemas de hoy son suficientes para hoy”. Ayúdame a desechar todas mis preocupaciones y el miedo por el mañana. Ayúdame a descansar en tu presencia. Por favor, toma mis manos y guíame. Pongo toda mi confianza en ti. En el poderoso nombre de Jesús, te lo pido. Amén.
Querido amigo, estamos orando por ti. Jesús te ama. Él se preocupa por ti. Por favor, continúa orando y aférrate a Jesús. Tu vida seguramente cambiará. Todas tus ansiedades huirán. No te preocupes.
Jesús ha escuchado tu oración. Seguramente la responderá. Por favor, búscalo y síguelo con todo tu corazón. Estamos orando por ti. Que Dios te bendiga y te convierta en una bendición para muchos.
Nos gustaría orar por ti. Puedes enviar tus peticiones de oración haciendo clic en el enlace de contacto que aparece a continuación. Se abrirá el buzón de correo electrónico predeterminado en tu teléfono móvil o portátil. Jesús te ayudará a salir de las ansiedades y el miedo. No te preocupes. Él se preocupa profundamente por tu futuro. Créele.
