El siguiente documento ha sido traducido del inglés. Si hay algún error de traducción, discúlpenos. Envíenos sus comentarios en la sección de comentarios a continuación.
El Señor tu Dios te bendecirá como lo ha prometido. Prestarás dinero a muchas naciones, pero nunca necesitarás pedir prestado. (NTV) – La Biblia
Mi querido amigo, Dios quiere cumplir esta promesa en tu vida. ¿Estás atrapado en una gran deuda y estás tratando de salir de ella? ¿Estás huyendo de tus acreedores? Quizás estés buscando ansiosamente la paz en tu vida y buscando consuelo en tus amigos y familiares. Si estás en esta situación, lee los puntos a continuación. Nos gustaría orar contigo al final de este mensaje. Por favor, considera lo siguiente antes de dar tu próximo paso:
- El simple hecho de que hayas incurrido en una deuda importante no significa que tu vida haya terminado. Puedes volver a la vida. Por muy grande que sea tu deuda, Jesús puede ayudarte. Él puede cambiar tu situación. Él puede darte una nueva esperanza y llenar tu vida de paz. No pierdas la esperanza. No hay nada imposible para Jesús. No mires tu situación, sino mira a Dios, que es más grande y poderoso que tu situación y tu problema. La Biblia dice: “No se ha acortado el brazo del Señor para salvar, ni se ha endurecido su oído para oír. Él te sacará. Jesús puede sacarte. Confía en Él”.
- Mantén tu salud y tu mente intactas. Lo mejor sería que tuvieras una mente sana para pensar y una buena salud para atravesar esta difícil situación. No sigas pensando en tus decisiones pasadas y en las malas elecciones que hiciste en el pasado. Esto podría hacerte enfermar mentalmente. Pídele perdón a Dios si has cometido errores en el pasado y has gastado tu dinero de manera imprudente, como en juegos de azar. Jesús te perdonará y llenará tu corazón de paz celestial. Dios nunca te recuerda tus errores pasados. Él se preocupa por ti. Él quiere ayudarte. Cuida tu salud física y mental y come bien. Los desafíos que atravesarás pasarán muy pronto.
- Tus acreedores pueden estar persiguiéndote y puedes estar experimentando abuso y vergüenza. Pero no pierdas la esperanza. Humilla tu corazón ante Dios y busca Su rostro. Aunque la tormenta se levante sobre tu cabeza, Dios te cubrirá bajo sus alas, te protegerá y te guiará. Todo cambiará muy pronto y tu vida volverá a ser normal. Jesús te dará palabras sabias para hablar y manejar la situación actual.
- Aprende a aceptar los errores y a no repetirlos. Si has elegido la opción incorrecta en la vida y eso se ha convertido en una razón para tu deuda, acepta tus errores y toma nota para no repetirlos en el futuro. Decide consultar a Jesús antes de tomar cualquier decisión importante en el futuro en la vida. La decisión podría estar relacionada con comenzar un nuevo negocio, inversiones, un cambio de trabajo o cualquier otra decisión importante. Jesús conoce nuestro futuro. Él puede guiarnos y ayudarnos a tomar la decisión correcta. Busca Su consejo siempre antes de tomar cualquier decisión financiera.
- Siéntate y prepara una lista para entender cuánto debes y a quién. De la lista, descubre cuál tiene el interés más alto. Haz todos los intentos posibles para saldar la deuda que tenga el interés más alto. Los préstamos con intereses más altos pueden crecer rápidamente y quedar fuera de nuestro alcance.
- Deja de usar tarjetas de crédito y empieza a vivir tu vida sin deudas con el dinero que tienes. Por poco que sea, aprende a vivir dentro del presupuesto. Esto significa una vida mucho más sencilla con un presupuesto reducido.
- Busca un trabajo, si no tienes uno. Reduce tus gastos al mínimo hasta que pagues tu deuda.
- Para reducir el abuso de los acreedores, haz todo el esfuerzo posible por vender lo que tienes y pagarlo. Puedes recuperarlo todo. Pero ahora mismo necesitas paz mental y libertad de deudas.
- Como familia, confía en el Señor. Pasa tiempo con Dios y ora juntos como familia todos los días. Dios seguramente responderá tus oraciones cuando esperes en Su presencia como familia.
- Tú y tu familia necesitan la ayuda de Dios para superar la situación. Encomienda tu vida a Dios y acéptalo como tu amo.
Querido amigo, sé que este es uno de tus momentos más difíciles. Dios seguramente te sacará de tu situación. Síguelo con todo tu corazón. Oremos juntos. Coloca tu mano sobre tu corazón y cree que Jesús puede cambiar tu situación de deuda. Él te liberará de tu situación. Oremos. ¿Podrías hacer la siguiente oración con tus propias palabras?
Querido Jesús, Tú conoces mi situación. Estoy endeudado. No tengo a nadie que me ayude. He tomado decisiones equivocadas sin consultarte. Lo siento mucho. Por favor, perdóname. Por favor, entra en mi vida y cambia mi situación. Confío solo en Ti. Solo Tú puedes cambiar mi situación y resolver mi problema. Te suplico con lágrimas. Jesús, por favor, ayúdame y libérame de la deuda. Estoy pasando por momentos difíciles. Por favor, lléname de tu paz celestial. Creo que puedes sacarme de esta situación. Te entrego mi vida. Por favor, sé mi Dios y guíame. Déjame seguirte todos mis días. En el nombre de Jesús, te lo pido. Amén.
Querido amigo, Jesús quiere hacerte Su propio hijo. Pídele perdón por tu vida pasada. Jesús te perdonará. Él renovará tu vida y te guiará como un padre guía a su propio hijo. Por favor, humilla tu corazón y ora a Jesús.
Jesús quiere perdonar tu pasado. Quiere hacerte una nueva creación. Lee aquí para saber más sobre cómo pedirle perdón a Jesús por tu pasado => Jesús quiere perdonar tu pasado
Si quieres saber más acerca de Jesús y cómo seguirlo, puedes leer aquí => Acepté a Cristo, ¿qué sigue?